RESEÑA – Sifu

No vamos a fingir que las películas de acción son grandes obras a la altura del cine de arte. Claro, muchas tienen altos valores de producción y la participación de actores de talla legendaria, pero su encanto no viene de su filosóficamente densa trama o del desgarro emocional de sus personajes; viene del explosivo espectáculo que se muestra en sus secuencias de combate, disparos y otras cosas que definitivamente son la antítesis de lo aburrido. Sifu es un videojuego que sigue una fórmula parecida, poniendo nuestra atención en sus increíbles mecánicas de juego y fluida acción incluso si eso descuida un poco la trama y uno que otro detalle del mundo donde la historia se desenvuelve. 

Sifu cuenta una historia que bien podría estar violentando los derechos de autor de alguna película de artes marciales de los setenta: somos un joven guerrero que está en búsqueda de venganza sobre aquellos que aniquilaron a su familia en el pasado…ya sabes, lo usual. Para servirse este platillo frío nuestro protagonista debe de atravesar diferentes secciones, cada una repleta de enemigos, caminos alternos y con un jefe esperando al final para poner a prueba nuestro Kung y nuestro Fu. Aunque hay un apartado de exploración que tienta a la rejugabilidad, Sifu realmente quiere que el enfoque sea el gameplay y en este sentido no podríamos estar más de acuerdo.

Sifu tiene ADN de beat em up, pero la ejecución de lo que vemos en pantalla es mucho más compleja de lo que podríamos imaginar. Piensa en un sistema de combate al estilo de Sleeping Dogs o Batman Arkham y agrégale una capa de múltiples combos que recuerdan más a estrategias de Sekiro que a una tarde de River City Ransom. Claro, dominar este sistema es difícil y toma tiempo, no es el tipo de juego en el que puedes aplastar todos los botones y esperar lo mejor, pero aprender el ritmo detrás del combate es una de las sensaciones más satisfactorias que podemos encontrar en un videojuego en memoria reciente; no por nada Sifu está siendo considerado como el primer candidato fuerte para el GOTY 2022.

Ahora bien, ¿donde están las grietas de este juego? Como adelantamos, la historia es lo que le sigue de cliché y no hay nada realmente inspirador en su presentación. Si necesitas una trama profunda para querer darle una oportunidad, la verdad es que eso no lo vas a encontrar aquí. Sifu es un título que depende completamente de su apartado técnico para destacar y para su fortuna no necesita nada más fuera de ello.