Netflix ha presentado un informe detallado en colaboración con la Agencia de Asuntos Culturales de Japón, centrado en mejorar las condiciones laborales en la industria del anime. El documento destaca las largas horas de trabajo que enfrentan los animadores, llegando a superar las 225 horas al mes, y los bajos salarios en comparación con el promedio nacional.
La plataforma asegura que está comprometida a pagar tarifas justas por las licencias de anime, garantizando que los estudios principales, subcontratistas y freelancers reciban una compensación adecuada. Sin embargo, la transparencia en la cadena de producción sigue siendo un desafío, y Netflix ha implementado medidas para mejorar esta situación, como la eliminación de intermediarios que aumentan los costos.
Además, el informe aborda problemas recientes como la participación de un estudio norcoreano en la producción de «Dahlia in Bloom» y la controversia por el empleo de un menor en “Isekai Onsen Paradise”. Para evitar futuros inconvenientes, la plataforma exige mayor control en la cadena de producción y contratos más claros para los trabajadores.
Finalmente, Netflix destacó su papel en empoderar a los creadores de contenido mediante informes de rendimiento, que proporcionan datos útiles para futuras negociaciones y producciones, destacando su éxito con proyectos como la adaptación live-action de «One Piece».
