MUNDO ANIME: SENKO-SAN

La vida cotidiana de Nakano, un asalariado que trabaja para una empresa explotadora, se ve repentinamente puesta de cabeza por Senko-san, una niña de 800 años con apariencia de zorro. Ya sea cocinando, limpiando o dándole atención especial, ella curará su agotamiento con sus tiernos «cuidados».

No hay forma de negarlo: este es un anime repleto de fan service y lolis. Eso es obvio por muchas cosas, como la imagen de la portada, la frase «niña de 800 años» en la sinopsis, y que el estudio es Doga Kobo, notorio por buscar la satisfacción de gustos culposos. Si buscas algo que no sea un hombre adulto que frota la cola y/o cabeza de una chica zorra que parece tener aproximadamente 8 años, probablemente deberías abstenerse de ver a Senko-san. Eso es realmente todo lo que esta serie es en términos de trama. Sólo hay dos personajes que importan. Nakano es un personaje principal deprimido con el que cualquier godín insatisfecho con su trabajo de oficina podría identificarse. Incluso si eres alguien que nunca ha tenido un empleo, es probable que al menos puedas relacionarte con estar cansado o deprimido de la misma forma en la que Nakano lo está. Senko, por su parte, es una linda y mullida zorra loli que cuida incondicionalmente de Nakano. ¿Qué más podríamos decir de ella? 

Cualquier otro detalle sobre su personalidad sale sobrando. El apartado visual es lindo y se adapta muy bien a la atmósfera de la trama, sin embargo, no hay nada realmente excepcional en él. Si bien el opening y el resto de la banda sonora tampoco ofrecen nada espectacular, el trabajo de actuación de voz si resulta ser algo que se siente muy especial. El papel de Junichi Suwabe como Nakano no es solo su mejor papel como actor de voz; también es, sin exagerar, una de las mejores actuaciones que podemos encontrar en el medio. Su voz contribuye enormemente a la comodidad y forma en la que nos invertimos emocionalmente en su personaje. La voz de Senko es muy linda, y eso es realmente todo lo que importa si lo que esperamos es escuchar cumplidos provenientes de la boca de una chica adorable. Eso sí, mucho de lo que hemos dicho hasta ahora se puede aplicar a casi todos los iyashikei, pero lo que hace que Senko-san destaque es la forma en la que aprende sobre los errores de otras series similares y hace todo por evitar cometerlos también, nunca alejándose del propósito central de la historia: ser una historia adorable y entrañable para la audiencia. 

A diferencia de algo como, digamos, Dragon Maid, Senko-san está mucho más centrado en lo que se supone que es. No se preocupa por presentarnos un elenco enorme de personajes o abusar del fanservice en lugar de desarrollar un argumento comprensible. Como resultado, Senko-san es un espectáculo reconfortante, lindo y relajante. Si estás buscando algo más, o si, por alguna razón, no puedo entenderlo, quizá sea mejor que te alejes cuidadosamente para no despertar la ira de los otakus más pasionales del género moe.