¿Por qué es que las historias más simples son a veces las que más llaman nuestra atención? ¿Será porque están libres de complejidades y eso nos atrapa más rápido? ¿O acaso se debe a que son una forma breve y eficiente de entretenimiento? Probablemente podríamos hablar por horas sobre el tema, pero por el momento sólo diremos que Koni-Chan es una de estas historias.
En sí aquí no hay una narrativa verdadera, Koni-Chan es más bien una serie de secuencias animadas cómicas que abarcan varios temas; desde el romance hasta la parodia. Imagina algo como el Laboratorio de Dexter o las caricaturas contemporáneas que se dividían en segmentos y contaban más de una historia en cada episodio. Puede que aquí nazca la raíz de su encanto.
En primer lugar, este es un anime que parece haber sido especialmente diseñado para ser doblado al español y nutrirse con la comedia inherente de la idiosincrasia mexicana. Esta no es una serie para ver subtitulada en el japonés original por más purista del medio que seas, hay que admitir que hay ocasiones en las que el doblaje es superior al material original y Koni-Chan es uno de esos casos. No sólo hablamos de la calidad de actuación de voz sino como los chistes y situaciones se ven perfectamente adaptados a la cultura latina. El único otro anime que hace esto tan bien que viene a la mente es Chin-Chan; no es coincidencia que en cuanto a temática esta serie y Koni-Chan parezcan cortados de la misma tela.
Quizá otra comparación que puede hacerse, aunque con un poco más de reserva es con Los Simpson en el que el doblaje en latino es mejor que el original. En cuanto a estructura narrativa, este es uno de esos animes de comedia divididos en tres segmentos de 7 minutos, cada uno con una historia diferente. La fórmula es bastante sencilla: el primer segmento es sobre la vida cotidiana, más que nada orientado hacia la comedia; el segundo es como una comedia romántica, un poco más cursi pero sin recaer en melosidad excesiva; y el tercero es una parodia, aprovechando el medio para contar algo completamente inesperado y divertido. No hay una trama principal, y los personajes principales no tienen un objetivo per se, lo que permite que cada episodio se sienta único y autocontenido.
Los personajes son memorables. Koni, el protagonista principal, es un niño gordito de doce años, y aún así, es la persona más famosa del mundo, la persona más fuerte del mundo y la encarnación de todas las virtudes de la historia. High, su amigo, es excéntrico, hiperactivo, y comienza un incendio donde quiera que esté.Nari, otro amigo, es el niño más rico del mundo, puede comprar cualquier cosa en este universo. Este equipo parece combinarse para crear la máquina de comedia ideal, abarcando prácticamente todo el tipo de humor que alguien pueda imaginar. Por último, tenemos a Moro, la chica que está enamorada de Koni. Ella es exhibicionista, causando hemorragias nasales a casi todos los humanos, excepto a Koni. Claramente esta es una representación femenina que no ha pasado la prueba del tiempo, pero el resto de la comedia es lo suficientemente buena como para que ignoremos nuestra campaña por lo políticamente correcto un rato. A final de cuentas, este es un anime que destaca por su simplicidad y la forma tan sutil en la que entretiene y hace reír. Incluso si no eres fan del medio deberías de darle una oportunidad: es tu deber como mexicano hacerlo.
