RESEÑA – Crash Bandicoot 4: It’s About Time

Ya lo hemos dicho antes: con suficiente tiempo de por medio, hasta lo más viejo puede volver a sentirse nuevo. Ahora esto aplicó para Crash Bandicoot y su nuevo juego It’s About Time, un título que no sólo hace referencia al viaje en el tiempo que adorna a este plataformero, sino también al hecho de que ya era hora de que alguien continuara de una manera digna la trilogía que Naughty Dog trajo a la vida en la época del primer PlayStation. It’s About Time triunfa en dar nueva vida a Crash, con gráficos caricaturescos que se sienten muy cómodos en 2020 y que no nos sorprendería ver que envejezcan bastante bien. Sus mecánicas, sin embargo, son el verdadero espectáculo moderno, pues se las han ingeniado para encontrar un balance entre lo retro y lo contemporáneo, sintiéndose frescas y familiares al mismo tiempo. Pero, ¿acaso todo es perfecto? ¿o nos estamos dejando llevar un poco por la poderosa fuerza de la nostalgia?

Es necesario entender que aunque el título indica que esta es la cuarta aventura de Crash, hay muchas otras continuaciones y reimaginaciones pasadas a la trilogía original del personaje, sólo resulta que esta es la que más fiel se mantiene a los preceptos establecidos por Naughty Dog durante la quinta generación de consolas. Por esto no queremos decir que el juego se mantiene primitivo o estancado en el estilo noventero, sino que decide construir sobre él en lugar de crear algo desde cero. La tendencia aquí, tal y como sucede en muchas secuelas y reboots de nuestros tiempos, es favorecer a la evolución sobre la revolución. It’s About Time, siguiendo esta formula, hace que las viejas y sencillas mecánicas de Crash se sientan frescas una vez más: brincar, esquivar obstáculos y controlar los movimientos de nuestro personaje se siente exactamente igual que antes, pero con unos pequeños detalles que lo hacen sentir infinitamente más intuitivo. Este es, después de todo, un juego de plataformas donde la precisión es clave, y los controles revitalizados ayudan a que nuestra experiencia sea mucho más amena, independientemente si hemos jugado un título de Crash antes o no.

Claro, esto no significa que Toys for Bob sólamente ha pulido viejas joyas para darles nuevo brillo; también se ha esforzado en aportar las suyas propias. Podemos montarnos sobre rieles y convertirnos en una especie de montaña rusa humana, algo que probablemente copiaron de la saga de Ratchet & Clank; también podremos correr sobre paredes para alcanzar nuevas áreas, una cosa que imaginamos se vio inspirada de los juegos de Jak & Daxter. Aunque estos no son para nada elementos nuevos y podemos notar exactamente de dónde están siendo tomados, la forma en que son implementados en It’s About Time es inequívocamente genial.

Hablando de cosas nuevas, hay una amplia selección de personajes jugables que han sido diseñados para sentirse lo suficientemente familiares a los controles de Crash como para no romper el ritmo del juego, pero también con tanto encanto único que bien podrían protagonizar su propio spin-off más adelante. Es claro que la idea aquí es mantener el juego constantemente fresco y cosas como esta lo logran por la manera en que mantienen atenta a la audiencia.

La experiencia en general se resume en un completo homenaje a todo lo que amamos de la trilogía original de Crash con el valor agregado de amenidades modernas que hacen de It’s About Time una joyita que encaja a la perfección con los plataformeros contemporáneos sin perder ese encanto retro que obviamente aludirá a las audiencias que lo jueguen. Es extraño, pues aunque su base se ve claramente arraigada en los noventa y podríamos hasta decir que la experiencia se siente primitiva comparada con plataformeros contemporáneos como Super Mario Odyssey, It’s About Time nunca deja de sentirse divertido. Quizá ese era el punto, pues es un juego que en lugar de innovar nos regresa a una época en la que las narrativas complejas, las mecánicas realistas y los gráficos más nítidos no nos importaban; lo único que queríamos era pasar un buen rato. Es tiempo de volver a aquellos tiempos, ¿no?