Poco a poco, México ha sabido cómo destacar dentro de la escena de los videojuegos independientes. Team17, Navegante y Bromio traen ahora un nuevo ejemplo de esto en la forma de Greak: Memories of Azur, un título de plataformas y aventura para un jugador que encuentra un lugar en el PlayStation 5, la nueva generación de Xbox, Nintendo Switch y Steam.
Fiel al amor que los mexicanos le tenemos al género Metroidvania, Greak desarrolla su estructura con base a esta clásica fórmula. Por esto, queremos decir que encontramos mucho backtracking y la tarea de hallar la mejor forma de utilizar las múltiples habilidades de nuestros protagonistas para revelar todos los secretos de este bellamente renderizado mundo.
Hablando de ello, el entorno de Greak y la historia que lo acompaña no son nada menos que cautivadores. El héroe titular, Greak, y sus hermanos, Adara y Raydel, deben de usar sus poderes para navegar por su tierra natal, la cual ahora se ha convertido en un lugar hostil como consecuencia de la invasión de los Urlag. Alternar entre estos personajes no sólo es divertido en términos de la jugabilidad, sino que trae a la mesa cierto gravitas narrativo: Raydel, al ser más fuerte con capacidades defensivas, hace frente a los peligros que sus hermanos no pueden; Adara, con sus poderes mágicos, trae a la mesa una variable inesperada; Greak, como un espadachín típico, balancea las habilidades de sus otros dos hermanos. Esta dinámica refleja la relación entre los hermanos, y mientras alternamos entre ellos y sus habilidades podemos apreciar el crecimiento de los tres como personajes.
Si estos matices no son inmediatamente aparentes, las escenas dibujadas a mano que llegan en una perfecta transición desde el gameplay dejan en claro las connotaciones emocionales de la historia de Greak. No queremos arruinarles nada, pero alcanza el mismo impacto que videojuegos con una presentación mucho más realista y guionización más rebuscada.
La suma de sus partes hace de Greak: Memories of Azur algo especial en todos los sentidos. Quizá sería fácil ver a la obra como algo derivativo de otros juegos como Ori and the Blind Forest y Hollow Knight, pero pequeños detalles que se encuentran al jugarlo demuestran lo único y original que este proyecto mexicano realmente es.