Recuerden que no todo se reduce a moverse y disparar, también hay multitud de acciones que resolver al instante. Para todo ello no hay nada mejor que el trabajo en equipo, y en ese sentido el indie que hoy nos reúne, Space Crew, utiliza muy bien la planificación grupal fuera de órbita para llevarnos a una aventura ingenua pero llena de emoción y ciencia ficción.
Los estudios Curve Digital y Runner Duck retomar la idea de su anterior juego, aunque ahora con un poco más presupuesto y añadiendo nuevas premisas y características. En Space Crew manejaremos a una tripulación de un transbordador espacial encargado de realizar varias misiones de diferente categoría. Desde derrotar a una horda de enemigos, transportar un paquete de un lugar a otro, o acudir al rescate de cierro científico que está atrapado en una base espacial a punto de explotar. Ahora bien, a decir verdad, el juego no toma su historia muy en serio, por lo que la campana del juego será la menor de nuestras preocupaciones. Un camino lleno de imprevistos que deberemos solventar con el buen hacer de nuestro equipo espacial.
Nuestro equipo estará conformado por seis miembros de nuestra tripulación, cada uno con su categoría y rol en la nave. El capitán será la persona encargada de establecer la ruta deseada y ejecutar el salto al hiperespacio. El ingeniero medirá la salida de potencia del reactor y arreglará cualquier fallo de la nave. El oficial de seguridad será quien abra o cierre las compuertas para ventilar zonas concretas de la nave. El oficial de armamento será bueno con las torretas dispuestas en los cuatro costado de la nave y el oficial de telecomunicaciones será la persona responsable de establecer contacto tanto con nuestro destino como con las zonas designadas.
En Space Crew más vale prevenir que curar, ya que podremos personalizar a nuestra tripulación y nave como más nos guste, aunque lo más importante será customizar cada habitáculo como nosotros nos sintamos más cómodos. El acomodar extintores, trajes espaciales, fusiles de asalto y botiquines en un lugar estratégico será fundamental para que no perdamos tiempo innecesariamente. No solo habrá que conocerlos entresijos de nuestra nave, sino que habrá que conocer muy bien las habilidades de nuestro equipo.
Evidentemente el juego es complejo en su mecánica, la variedad es bastante agradable, sin embargo donde podemos tener nuestros peros es en el apartado gráfico. Space Crew toma el pixel-art como referencia, con personajes algo genéricos pero prácticos. Lo mismo pasa con la nave, con un diseño sencillo para no perdernos entre tantos objetos pero lo suficientemente agradable como para no ver su estilo artístico con malos ojos. El problema es que el espacio no da para más. Pese a unas bonitas imágenes con planetas, soles y meteoritos de fondo, a la larga veremos que estos se repiten una y otra vez. Además el juego tiene esta pinta infantil que si bien no rompe con la experiencia, no se empata con la complejidad que conlleva tener una misión espacial como esta. Pero bueno este es un detalle subjetivo que quizá a otros no haga ruido, pero quizá a nosotros nos hubiera gustado un poco de más cuidado en el apartado visual.
Los chicos de Curve Digital y Runner Duck han sabido exprimir las mecánicas de Bomber Crew y adaptarlas al espacio exterior de una forma acertada. Space Crew nos pone en la piel de una tripulación que está siempre “entretenida” intentando solventar los problemas que surgen en la nave. Su composición de juego de rol, la gestión de la nave, y las habilidades que van adquiriendo cada miembro del equipo hacen que el título nunca caiga en la monotonía. De hecho, cuanto más se complican las cosas, más entretenida es la partida y eso genera momentos únicos. Puede que las misiones no sean muy originales, o que los escenarios tampoco digan mucho. Pero lo importante es lo que sucede dentro de la nave, y en ese sentido, Space Crew no decepciona. Disponible para Playstation 4 y Steam.